Cuando no estoy entonces existo, cuando estoy lejos puedo estar cerca, cuando vuelvo entonces estoy partiendo lejos. Al mundo donde viven las ilusiones, un mundo donde la magia es real y es la única regla para vivir.
Ese mundo es el mundo del pensamiento, más real que lo que ven nuestros ojos y escuchan nuestro oídos, es real porque es donde nuestras ideas están, quien no puede balancear lo que siente con lo que hace, tarde o temprano termina abandonandose a sí mismo. Por eso debes escuchar tu corazón y actuar concientemente con tu mente, la consecuencia está siempre al principio en el mismo instante de la causa, no al final.
Solo hay un regla en todo esto y está implicita en nuestras relaciones.