Hasta hoy he sido una persona que no planifica en absoluto alguna actividad. Si bien preparo las cosas que hago no dedico tiempo a realizar una planificación que creo es fundamental cuando quieres administrar tu tiempo de buena manera.
Mi forma de actuar ha sido la de asumir lo que venga estableciendo prioridades temporales para salir de situaciones adversas, generalmente digo sí a las cosas que quiero hacer, no me pierdo de nada que me interese, pero esto puede acarrear problemas cuando no planificas el tiempo como por ejemplo, la postergación de los seres queridos; porque en general me manejo bien con "mi" tiempo, alcanzo a hacer las cosas que quiero pero "su" tiempo no coincide con el escaso que yo pueda tener en algún minuto.
La flexibilidad en el reaccionar antes eventualidades te lo puede dar una planificación de tu tiempo; a mi me carga planificar, no me puedo ver planeando las cosas que tengo que hacer, yo soy de hacer las cosas en el momento que sienta que debo hacerlas, cuando me encuentro en las condiciones indicadas para realizar lo que tengo que hacer (aún no me falla). Soy de los que dice sí a todo lo que le gusta y no soy de los que deja las cosas a medias, así que siempre estoy con hartas cosas y proyectos por hacer, es parte de mi, me gusta estar atareado (con cosas que me interesan) y ocupar cada segundo de mi tiempo en algo provechoso en la vida (según yo). Incluso me cuesta ir a descansar por estar haciendo las cosas que me gustan, en ese sentido pienso poco en el mañana incierto, sólo pienso un poco en el mañana que conozco en el que aún estoy ocupado pero cuando lo que estoy haciendo se termine, creo que confío en que aparecerá otro proyecto para seguir ocupado.
Creo que lo que se construye por muy diverso que parezca es la medida de la dimensión de la base, y cada punto diverso de conocimiento apunta a un mismo fin: la experiencia y la búsqueda, la búsqueda del sentido, de la vida, de uno mismo, del mundo, del universo, de los demás. Creo que nos entretenemos bastante con el mundo simple de la vida, aquel que nos da las facilidades de existir y nos permite no ocupar nuestros sentidos para vivir.
En fin, creo que debo aprender un poco más de las personas que me rodean y aman, la reflexión constante cae ante la actitud de amar, el sentido es completo y no hay refutación posible. Al final la sabiduría es sólo entendible por los sabios.
martes, diciembre 06, 2005
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
3 comentarios:
Creo que planificar el día está bien, súper bien porque le damos importancia y prioridad a las cosas, además de esta forma podemos controlar en cierta medida nuestro tiempo. No creo que esté bien recibir TODO lo que se nos ponga en frente porque se nos olvidan las cosas importantes de la vida, nuestra familia, amigos, las personas que amamos.
Además si decides comprometerte en algo es necesario cumplirlas cien por ciento y cuando corresponde, no cuando se nos antoje y por ultimo, todo lo que hagamos en la vida debemos procurar no dañar a los demás porque si lo hacemos significa que somos personas inconcientes e iresponsables y creo que un tanto egoistas porque solo pensamos en nosotros mismos.
no estoy de acuerdo con la última idea, ya que la sabiduría no es un privilegio de los sabios sino una herramienta para que el ser común y corriente y el ignorante que la busca llegue a ser sabio.....
Tienes razón, pero hay una sutileza, hago una distinción entre los frutos de la sabiduría, que son las cosas que nacen de decisiones sabias, y eso es lo que el ser común y corriente puede ver (los frutos de la sabiduría) y lo hace buscarla; pero la decisión (o palabra) sabia es invisible a quien no posee sabiduría alguna y sólo los sabios pueden ver claramente.
Son como las miradas cómplices que nos apartan de las verdades más simples que en el futuro entenderemos.
Y sí, sirve a todos y los frutos de la sabidurá no son un privilegio de pocos sino de todos.
Publicar un comentario